Ale.Co.

Ser o no ser... como el otro.

El postmodernismo nos lleva a una forma de pensar un poco contradictoria. Vivimos en un mundo contemporáneo que busca a como de lugar alcanzar una sociedad utópica aún cuando todos saben que ya nos pasó eso de largo. Una sociedad donde todo es para todos (globalización) y nada para nadie (radicalidad). Es un lugar donde el ser humano esta incompleto y busca llenar esos espacios de cualquier forma. Eso por eso que buscamos la manera de ser diferentes siempre y queremos que todo cambie, desde las instituciones hasta la filosofía, los paradigmas y la religión, la ciencia y la moral. El individualismo se perdió por esa busca de ser individuales. ¿Curioso no? La modernidad nos trajo un mundo lleno de posibilidades para alcanzar que solo provocaron nuevas y “modernas” “enfermedades” como el stress, el hambre y la pobreza. Enfermedades de un mundo desconfiado, sin respuestas y con un sin fin de ausencias, donde todo se copia y es dictado por los medios de comunicación y los estereotipos y superficialidades de un “sujeto” desaparecido que busca encontrarse.
Pero, ¿Dónde esta? Es una búsqueda infinita, que hace que los héroes, los ídolos lo mágico y lo mítico traigan respuestas a todo, ya que la educación que imparten las escuelas no puede competir con algo tan inmediato y presente como son las “imágenes” de una nueva epistemología multicultural, donde las instituciones sociales, (como el núcleo familiar y las tradiciones) cambian, por miedo y desconfianza un futuro incierto.

Es así, que un ser humano tan vacío crea nuevos valores en busca de saciar el placer del consumismo actual y eso, aunado a la búsqueda por el individualismo solo nos lleva de regreso a esas palabras tan reconocidas de la obra de Shakespeare... ¿o fue Superman? No lo sé, esperaré mas tarde para verlo en la televisión mientras me pongo mis pantalones y camiseta Hollister nuevos que se parecen a los de mis compas. Ja!!!!!!!!! Claro...

Ser o no ser... como los otros.

... es de noche.

Aunque realmente no es muy tarde que digamos, pero el mundo esta loco y todo lo que lo rodea también y eso incluye al sol, la luna y las estrellas. Desde temprano el sol se va y nos deja en un mundo totalmente diferente y opuesto al que la primera luz del día nos regaló. Todo es distinto, la gente actúa de otra forma, incluso muchos solo se atreven a ser si mismos en la luz de la luna, talvez será por el miedo al que dirán o por el estilo de vida que todos llevan en estos días "modernos".

Despertar, comer algo, estudiar, comer algo, estudiar, comer algo, dormir. ¿No es extraño que toda una vida pueda describirse en un secuencia de palabras? Es tan simple que se nos pasa de largo. Es tan simple que lo olvidamos o ignoramos. Todo es muy simple y la obscuridad de la noche cambia, también, lo que pensamos y es por eso que cosas tan sencillas como un árbol, un pájaro, una persona, son resaltadas en la noche. Curioso. la obscuridad, ausencia de luz, las sombras, donde se supone que no vemos nada, donde se supone que todo se oculta, es el momento perfecto para ver y sentir de nuevo la simpleza de la vida.

A veces me detengo un momento, en medio de la nada, justo a mitad del Instituto donde estudio, a mitad del parque que recorro todos los dias después de clases, a mitad de la calle y sin importar que o quien me rodee me detengo y observo. ¿Qué pasa? La gente pasa, las hojas de los árboles se mueven, las nubesa van y vienen y desaparecen... Me detengo por n momento y al mundo parece no importarle. Este mundo, esta vida, esta sociedad, parece no notar mi ausencia por ese instante en que decido perderme y esto es simplemente reconfortante. Saber que puedo hacer y deshacer a placer es... es... es...

es de noche...

Estoy pensando, en todo y nada... se nota?